Como ya he comentado otras veces, cada vez que me sale al paso una palabra que no conozco me invade el entusiasmo, aunque la palabra en cuestión no halle hueco fácilmente en mis conversaciones cotidianas.
El entusiasmo por el hallazgo es aun mayor si además la palabra me gusta en sí misma, es decir, por su sonido; y más aún si después descubro que tiene un significado que me resulta grato por la razón que sea.
Por suerte para mí, encuentro con frecuencia muchas palabras que tienen esas cualidades. Es decir, que además de ser ventanas nuevas que se abren a nuevas partes del mundo, son como esos pequeños objetos que nos gusta coleccionar aunque no los usemos nunca, salvo para darnos el gusto de contemplarlos, que no es poco.
Una de las palabras que he añadido últimamente a mi colección es «facecia», que me resulta muy graciosa; y además la cosa tiene su gracia, porque significa precisamente «chiste» o «cuento gracioso», y deriva del latín facetia, que no es otra cosa que eso mismo: gracia, broma, agudeza.
El diccionario señala que es palabra en desuso, pero yo estoy deseando que alguien me cuente alguna facecia.
La última palabra de hoy también tiene una sonoridad casi jocosa, aunque no es ninguna facecia. Se trata de «melopeya». La melopeya, según indica el diccionario, es el «arte de producir melodías», ya ven qué cosa tan bonita, y también se denomina así a una entonación monótona con que se acompaña un recitado.
Seguramente a ustedes, como a mí, se les ha venido a la cabeza esa otra palabra tan parecida que es «melopea», y que asociamos con el consumo de ciertas dosis de bebidas alcohólicas. Lo curioso es que al buscar «melopea», el diccionario nos remite en primer lugar a «melopeya», es decir, que se trata de otra forma para el mismo concepto. Aunque además de este significado, melopea tiene, claro está, esa acepción coloquial de «embriaguez».
Y de forma inesperada, entre los eslabones de esta cadena me encontré con un sinónimo de ese recitado monótono que es la melopea; se trata de «canturía», otra palabra que me ha parecido bastante garbosa.
Nuevamente, cuánto más fino será rogarle a alguien que ponga fin a su canturía que decirle simplemente que se deje de monsergas.
Yo, por si acaso, termino aquí.
17 comentarios:
Qué chulada, y qué casualidad. No conocía el término, la verdad.
Gracias por tus notas :-). Un abrazo
Cuánta riqueza de vocabulario y qué desaprovechado está.
Me temo que irá a peor.
De hecho tú le explicas este post a la mayoría de los jóvenes y te mirarían como si hablaras en marciano.
Besos.
Gracias, Albada.
Un abrazo.
Eso creo yo, Toro, que el lenguaje se va empobreciendo cada vez más por falta de uso, y por mal uso.
Lo que dices de los jóvenes me ha recordado a una alumna que tuve una vez, una chica de diecinueve años, ojo, que cada vez que yo decía alguna palabra que ella no conocía se creía que me la estaba inventando.
De ahí a creer que hablo en marciano hay un paso :D
Besos.
Gracias por hacernos partícipes de tus descubrimientos.
Muy interesante.
Me ha asombrado "estafermo". Me suena o bien a lenguaje legal o administrativo o, claro, a "enfermedad"...que vete a saber si en italiano antiguo ese "fermo" sí tenía que ver con la postración por enfermedad...
Ya sabes que algunas borracheras son de mucho cantar...jeje "El vino que tiene Asunción ni es...etc, etc"
Imposible persistir; más aún con la invasión anglófona.
carlos
... anglófona y anglógrafa...¡cómo odio que en los anuncios, en los carteles, en las marcas, etc ya sea obligatorio que al menos una palabra tenga que ser en Inglés...
carlos
Vaya, esta vez conocía una y media: la facecia y la melope(y)a. La primera ya me imagino que estará en desuso, porque se leía con cierta frecuencia en los autores españoles de hace un siglo o más (el último al que se la ví fue a Umbral, el de la "prosa sonajero" como decía el malvado Marsé).
"Estafermo" parece un poco rebuscada, muy italiana, sí. En cambio, "canturía" tiene gracia, porque refleja casi lo contrario de lo que sugiere.
Venga, a currar: queremos más.
Una pena que no pongamos más empeño en sacar del armario y quitarles el polvo a esas palabras.. Son bonitas, suenan bien y, para mi lo más importante, suelen tener mucha más precisión en lo que señalan que sus equivalentes...
Intentaré recordarlas, gracias.
Tampoco conocía ninguna esta vez. Curiosamente 'estafermo' me ha sonado, al igual que a Carlos, a algún tipo de concepto administrativo, como un mal anagrama de 'testaferro'. Claro que también he pensado en la contracción de ''está enfermo'', como por ejemplo una persona que sufre una cefalea muy parecida a una melopea como efecto secundario de esa vacuna Astrazeneca que nos amenaza... Y perdona por dejar esta vulgar facetia, que no tiene mucha gracia. Mejor dicho, ninguna :P
Con 'Facetia', por su sonoridad, también he pensado en el castellano antiguo, cuando la hache aún no había sustituido a la efe en tantos casos ('fazañas', que diría Alonso Quijano, embebido en sus romances de caballerías medievales). Claro que en este caso no hay una evolución directa.
Este tipo de entradas son un gustazo, Ángeles. Espero que alguna de estas palabras se me pegue, si no en el uso cotidiano, sí al menos en la memoria.
Un saludo.
¡Hola! La verdad es que últimamente me ha dado por mirar en el diccionario y aprender palabras nuevas, ya quería hacerlo años, pero ahora se me ha presentado la oportunidad por cosas de la vida, la palabra de estafermo creo que ya la había escuchado antes un par de veces, supongo que porque me encantan las películas medievales y bueno, en general estudiar esa etapa tanto libros, series, buscar en internet jajaja. Te sigo y te invito a pasarte por mi blog. Un saludo.
Gracias a ti, Macondo. Me alegra mucho que te haya gustado.
Es curioso, Carlos, que tanto a ti como a Rodión, os haya sonado estafermo a concepto burocrático. A mí no se me había ocurrido. Sí me suena, claro, a "estar enfermo", jeje. Pero no, no tiene que ver con eso. La palabra italiana "fermo" proviene del latín "firmus", como nuestro "firme", y significa justo eso, firme, estable, fijo...
A mí también me da rabia esa invasión tontorrona del inglés en casi todos los ámbitos de la vida, porque contribuye a un empobrecimiento general no sólo de nuestro idioma, sino de la propia lengua inglesa, que de tanto usarse en todo el mundo, y no siempre bien, también parece estar sufriendo un proceso de degradación.
Saluditos!
Rick, me ha gustado eso de "prosa sonajero", aunque parece que lleva un poquito de mala uva, sí.
No he leído nada de Umbral, pero si usa palabras como "facecia" ya me dan ganas de leerlo, desde luego.
Gracias por el interés. No tardaré volver con otra canturía o melopeya de estas mías :D
Pues sí, Beauséant, es una pena que palabras tan sonoras y precisas vayan cayendo en desuso.
Quizá quienes de una manera u otra, por muy humildes que sean esas maneras, escribimos cosas que leen otras personas, podríamos de vez en cuando usar términos de estos tan clásicos y olvidados pero que tienen tanto empaque. Así por lo menos nos daríamos la satisfacción de sacarlas y quitarles el polvo, como dices, y lucirlas y airearlas por ahí de vez en cuando.
Gracias.
Rodión, tu "mal anagrama" me ha llamado la atención; como le digo a Carlos, no había visto yo ese "estilo administrativo" que habéis visto vosotros en "estafermo", aunque ahora me parece muy lógico (testaferro, testamento, estafeta... :D)
Y la contracción de "está enfermo" parece un falso amigo en el que es fácil caer, desde luego.
También tus elucubraciones en torno a facecia tienen su gracia, eh? :D
Muchas gracias, me alegra mucho que te gusten estas entradas.
Saludos.
Hola, Carolina. Muchas gracias por tu visita y tu invitación. Pasaré por tu blog.
Un saludo, y a seguir aprendiendo palabras!
Denis, el protagonista de 'Crome Yellow' de Aldous Huxley, cuenta que siempre se había sentido fascinado por la sonoridad de la palabra 'carminativo'. Atribuía a ese término multitud de virtudes y beneficios que le parecían propios de la sonoridad de la palabra, hasta el punto de incluírla en uno de los poemas que escribía ocasionalmente:
«…And passion carminative as wine…»
Entonces, decidió averiguar por fin el significado de la palabra. Su única fuente era un diccionario inglés-alemán. Leyó y, de golpe, toda una construcción imaginaria, una narrativa creada por su fantasía desde la infancia se vino abajo.
Y en otro lugar y otro tiempo, Joni Mitchell dedicaba su primer album de canciones a un tal Mr. Kratzman, un australiano que había sido su profesor de inglés en la escuela secundaria de Saskatoon.
«This album is dedicated to Mr. Kratzman, who taught me to love words.»
El sonido de las palabras, al que algunos asignan una relación misteriosa con el significado…
Saludos.
Creo que, dada la riqueza de nuestro idioma, por más años que vivamos siempre seguiremos encontrando por aquí y por allá desconocidas piedras preciosas como éstas.
No conocía ninguna y ha sido un placer descubrirlas con tu amena explicación de todas ellas.
Yo hubiera definido melopeya como "epopeya con fondo musical" (válgame la facecia xD)
Muy curioso lo de estafermo, ha sido como enterarse de que pasmarote tenia un primo sinónimo italiano.
Debería existir el "Dia de la palabra en desuso" para que todos fuéramos resucitando algunas. Aunque solo fuera por airearlas un poco.
Estupenda entrada la de las palabras embriagadoras. Siempre son un hallazgo estupendo y tú las encuentras y las compartes con nosotros con muy buen sentido del humor, con "facecia" :-)
Cuando comenzaste a hablar de "melopeya", me acordé de su hermana famosa: "melopea". Me ha gustado mucho "canturía", suena preciosa.
Y debo añadir que de todas las palabras que has compartido con nosotros conocía una: estafermo. Investigando, en cierta ocasión, sobre juegos y torneos medievales esta palabra salía a relucir de cuando en cuando...
Qué bueno, entangled, el caso de este personaje. No he leído la novela, pero me imagino el corte que debe llevarse el amigo Denis :D
En efecto, las palabras tienen un gran poder evocador, y en ocasiones, ya lo hemos comentado muchas veces, no encontramos correspondencia entre lo que nos sugieren o su sonido, y su significado. Es un tema muy interesante que da para mucho meditar.
Gracias por tu comentario, como siempre, y por el enlace.
Sin duda, Juanra, nadie puede llegar a conocer todas las palabras de su idioma. Ya conté el caso de aquella alumna mía, de nueve años, que se sorprendió muchísimo cuando le dije que yo no conocía todas las palabras del español, porque la chiquilla creía que ella sí :D
Tu idea del "Dia de la palabra en desuso" me parece colosal, así que voy a informarme sobre qué hay que hacer para instaurarlo de inmediato!
Gracias!
Muchas gracias por tus palabras, MJ :)
No me sorprende que conocieras "estafermo". Me imagino que en tu ámbito, la Historia, o concretamente la historia medieval, debe ser relativamente frecuente encontrarla en su acepción literal, como ha comentado Carolina.
A mí también me parece muy bonita "canturía", me alegro de que te haya gustado.
En el mundo de la comunicación, cada vez conocemos menos (y peor) el lenguaje.
Saludos,
J.
Así es, José A. García. Creo que en eso estamos todos de acuerdo.
Gracias. Un saludo.
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