Quizá algunos de los amables lectores de este blog se acuerden de los otrora famosos Premios Gamba. Famosos en este modesto espacio, claro, pero famosos al fin y al cabo.
Y como recordarán quienes lo recuerden, los Premios Gamba se otorgan a aquellos que, teniendo el lenguaje como herramienta principal de su desempeño profesional hacen un uso atolondrado, insensato y bobalicón del mismo, sufriendo así deslices, resbalones y hasta caídas estrepitosas en los pulidos suelos de nuestro bello idioma.
Pues bien, después de mucho tiempo en que dicho galardón no se ha otorgado a nadie (públicamente), hoy presentamos nueva remesa de candidatos, que para la ocasión hemos distribuido en dos categorías diferentes: No sé lo que me digo, para aquellos que demuestran no conocer el significado de las palabras que están empleando; y Tontinglish, para quienes tienen el hábito de colar en su discurso abundantes anglicismos, siempre sin necesidad y casi siempre con necedad.Sin más preámbulos, estos son los gambazos que optan a un Premio Gamba:
En la categoría No sé lo que me digo, tenemos, por ejemplo, el caso de un reportero que, en tiempos de vacunación contra la Covid, nos informaba de que un hombre se había disfrazado de pobre para ponerse la vacuna, intentando colarse "entre los indígenas".
No me digan ustedes que esa confusión entre "indígena" e "indigente" no merece un premio. Y algo más, quizá.
Como también lo merece sin duda la periodista que, por las mismas fechas y hablando sobre las pruebas PCR, se refirió a "la introducción del isótopo".
Y también tiene mucho mérito la reportera que nos informaba de que, respecto a la vacuna, seguía habiendo "muchos excéntricos".
Claro, es que el que es raro es raro para todo.
En otros ámbitos y en fechas más recientes, un periodista dijo que habían detenido a un atracador que actuaba siempre de la misma manera, a saber: entraba en un establecimiento, ataba al empleado y después "perpetuaba el robo".
Se
ve que el tipo se quedaba allí robando eternamente.
Y por último, tenemos también el desconcertante caso del reportero que, durante el mundial de fútbol, informaba de que miles de aficionados argentinos se habían quedado sin entradas para la final, y protestaban ante el estadio porque "querían ver el partido de cuerpo presente".
Pasmoso, ¿verdad?
Por su parte, la categoría Tontinglish también ofrece mucho donde elegir. Por ejemplo, los reporteros, tertulianos y conductores de programas varios que dicen cosas como: "Las empresas están poniendo el target en los jóvenes"; "Yo quiero un streaming de las conversaciones" o "Las leyes no escritas son el check-balance de la Constitución".
También en reseñas de libros y películas se dicen cosas muy raras, como: "Para hacerse una idea del mood de este libro...", o "Más allá del name dropping del título..."
Y no nos olvidemos de la publicidad, ese maravilloso campo de cultivo donde el anglicismo crece exuberante a lo largo de todo el año, y así podemos oír frases como: "Consíguelo sin cambios en tu lifestyle", o "Un nuevo morning show", y enterarnos de que existe un cosmético que tiene "efecto flow, efecto flash y efecto filler".
No
se puede pedir más, ni en cosmética ni en tontuna.
Para terminar, y fuera de categoría (y fuera de toda lógica), miren el insólito epígrafe con que se inicia un artículo sobre higiene bucal:
18 comentarios:
No sé si es la edad, que me hace fijarme en esas cosas, o que el empleo de periodista pasa por sus momentos más bajos en mucho tiempo, pero cada vez veo más gazapos de ese estilo. Supongo que antes había una guía de estilo, un correcto y un por de vergüenza, pero en internet lo que tenemos son monos mal pagados que escupen y cobran por palabra...
Lo peor de los ejemplos que has puesto es que muchos se cometen por intentar parecer cultos....
Me ha gustado el nombre del premio, tenemos que pedirle a una inteligencia artificial de esas que te haga una foto de la estatuilla.
Jo... qué panorama tan deprimente.
Y lo peor es que estos son los que han pasado las pruebas de selección laboral.
No quiero ni imaginar a los que se han quedado en el camino.
Besos.
Voy a parecer el abuelo Cebolleta, pero estaba recordando que, cuando antes íbamos a empezar el bachiller, una de las mayores exigencias era superar la prueba de un dictado. Creo que actualmente no lo superarían muchos de los que ingresan en la universidad e incluso bastantes de los que utilizan el lenguaje como herramienta para ganarse le vida.
Ejemplos como los que pones han dejado de parecerme graciosos para darme mucha pena y provocarme una gran preocupación.
¡Jajajajajajajaja.... jajajajajaja...etc, etc
Me lo he pasado bomba con los gambazos de tamaño langostino y con tu forma de contarlos.
Esto tiene que ser más habitual ¿eh?, que nos sienta muy bien.
carlos
Una pena muy humorística.:))
La categoría "No sé lo que me digo" es la buena: me ha encantado "los indígenas" y "los excéntricos". Luego ya el apartado "Tontinglish" me cabrea un poco, porque denota mucho mejor el grado de tontuna del personal escribiente. Y la tontuna no es lo mismo que la ignorancia: vale que en un medio escrito, en el que se supone que quien informa debería haber pasado alguna prueba de "cultura general", como se decía antes, las meteduras de pata son graves. Pero lo otro es vanidad, pura y simple: complejo de "nuevo rico lingüístico", por decirlo así.
Bueno, da igual: queremos más...
Hace tiempo coleccionaba agresiones al lenguaje, principalmente perpetradas por periodistas o políticos. Dejé de hacerlo. Principalmente porque me dí cuenta de que estaba llenando el disco de mi PC con basura innecesaria. Me ha tocado vivir un tiempo en que se aplaude la vulgaridad, se aprecia socialmente la ignorancia y el lenguaje es, o bien objeto de estúpidas disputas políticas, o bien arma de agresión para quien piensa apartándose del pensamiento único imperante.
Como dijo Meryl Streep «Ya no tengo paciencia para algunas cosas». O Schiller: «Contra la estupidez, los propios dioses luchan en vano».
Pero se agradece que algunos, como tú, levanten aún la voz para proclamar lo que la ciencia está ya anunciando: Que hay una correlación entre la pobreza del lenguaje y la disminución del cociente de inteligencia de la población.
(Vaya día que llevo :))
Siempre recibo con una sonrisa estas nominaciones a los Premios Gamba, porque sé de antemano que me voy a divertir. Y así ha vuelto a ser :) :) :)
Confundir escéptico y excéntrico o perpetuar por perpetrar tiene mucha gracia, pero indígena por indigente ya es la pera limonera! :D
Pero lo mejor de estas convocatorias es la gracia con que las presentas siempre.
También es verdad que prefiero las "No sé lo que me digo" (porque pueden venir por nervios o despistes) que las Tontinglish, que me dan más rabia que risa.
Hay un anuncio que oigo frecuentemente en Spotify en el que suena un teléfono y una voz de fondo dice ¿Será tu madre? ¿Será tu crash?
¿Pero de verdad hace falta esto?¡¡Anda ya!!
No creo, Beauséant, que sea por la edad, porque yo vengo fijándome en estas cosas desde que era muy jovencilla. Lo que ocurre es que hay mucha dejadez, la formación humanística es muy deficiente, y los niveles de exigencia en muchos casos se rigen por la ley del "bah, si nadie se va a dar cuenta", o la del "bueno, pero se entiende, ¿no?"
Otro tema son las prisas y las malas condiciones en que muchas veces se trabaja, y eso hace que se cometan equivocaciones y que no haya ocasión de corregirlas; pero hay otros errores que denotan simple ignorancia, o también atrevimiento, como señalas, que es otro de los males actuales: creerse uno más listo de lo que es.
Buena idea lo de la estatuilla :D
Saludos.
No lo había pensado, Toro, pero, en efecto, cabe suponer que los que vemos cometer esos errores son los que han superado alguna prueba de selección...
Besos.
Qué maravilla, Macondo, que superar un dictado fuese necesario para empezar el bachillerato. Sin duda sería de ortografía complicada (dentro de lo facilita que es la ortografía española) y léxico dificultoso. No, seguramente muchos de los que hoy entran en la universidad no lo superarían.
Sin duda es preocupante el escaso nivel formativo e intelectual que tenemos en España, y lo peor es que los estudiantes de una generación son los profesionales de la siguiente. No es culpa de ellos, claro, sino de los cambiantes y cada vez más simplones programas educativos.
Un saludo
Qué bien, Carlos, me encanta que te lo hayas pasado tan bien con esta entrada.
Lo que no sé es si será bueno para mi salud hacer esto con más frecuencia, porque tendría que ver más la tele :D
Saludos!
Cabrónidas, "una pena humorística" me parece una definición excelente del ambiguo sentimiento que provocan estos gambazos.
Gracias.
Es cierto, Rick, las tonterías del "tontinglish" son irritantes. Nadie está libre de cometer un error o una equivocación (aunque algunos sean, en efecto, muy graves), sino pura pedantería o catetez.
Por cierto, lo de "nuevo rico lingüístico" es genial, me ha encantado :D
Aun así quieres más, ¿no? :D Vale, lo tengo en cuenta.
Gracias.
Pues yo, entangled, estas meteduras de pata las colecciono a mano. Es decir, las anoto en el primer papelito que tenga delante en el momento de oírlas. Los conservo hasta que las comparto aquí con vosotros y después los desecho.
Es verdad que estas entradas de "gambazos" pretenden ser una queja y una crítica, pero no puedo evitar darle siempre un tono humorístico. Como dijo Horacio, "¿Qué impide decir la verdad con humor?" Prefiero reírme a enfadarme, pero es verdad que a veces es inevitable mosquearse un poco, porque por debajo de la anécdota está la penosa realidad, esa que atinadamente señalas en tu primer párrafo y en el último.
Espero que lleves mejor el día :)
Saludos.
JuanRa, me alegra un montón que te diviertas con estas entradas. Así esas irritantes meteduras de pata sirven al menos para proporcionarnos unas risas.
Jo, lo del "crash" (supongo que será "crush") tiene delito. ¡Qué nivel de esnobismo, my cat!
Efectivamente, no hace ninguna falta, pero algunos deben creer que hablar así es superchuli. O sea, super cool, you know what I mean? :D
Gracias!
¡Los Premios Gamba de nuevo! ¡Estupendo! Muy buena idea poner dos categorías. Las meteduras de pata son graciosas y llamativas. Lo del atracador que roba perpetuamente es increíble.
Coincido con los otros lectores que la categoría Tontinglish (¡qué buen palabro!), aunque es graciosa también es muy mosqueante y, efectivamente, se trata de creerse muy modernos. Cuando comienzan a hablar así no los entiendo y si estás en una conversación y preguntas qué han querido decir te miran como si fueras tonta, cuando los tontos son ellos. Si existe una palabra en español ¿por qué decirlo en inglés? Pero es que a veces ni siquiera es inglés, sino términos que no existen tampoco en el idioma anglosajón.
No me había dado cuenta de lo que comentas de los anuncios de cosméticos. Pero lo que sí he notado es que cuando anuncian un perfume o un coche, cada vez hay más sin traducir y sin subtitular. Y no se limitan a decir el nombre del perfume, hay unas pocas frases que dan por hecho que todos entendemos.
Lo del crush que comentan arriba lo dicen mucho los latinoamericanos y se ha contagiado a los españoles de la generación Z (esa generación que parece haberse propuesto que no les entendamos y no les importa empobrecer el idioma a pasos agigantados). Como supondrás, me imagino que en inglés significa eso, se refiere a la persona que te gusta.
Lo dicho, me encanta que vuelvan los Premios Gamba porque, además de lo gracioso de las meteduras de pata, está tu forma de presentarlas de forma desenfadada, divertida.
MJ, me alegro mucho de que te alegres tú por el regreso de los Premiso Gamba :)
Respecto a lo que dices sobre el "palabrerío" en inglés, me parece de una mala educación extraordinaria que alguien se ría de otra persona o la mire mal por no entenderlo.
Y tienes razón: muchas de las expresiones "en inglés" que se utilizan no pertenecen en realidad a la lengua inglesa, o se emplean de manera inadecuada. No me sorprende que los británicos estén muy mosqueados por el uso abusivo y tantas veces degradante que se hace hoy de su idioma en todo el mundo.
Sí, efectivamente, "crush" se utiliza para referirse a la persona que te gusta, tu amor platónico, tu amorcito, o tu novio/a en sentido irónico. Antes decíamos: "Ahí viene tu novio", pero ahora hay que decir: "Ahí viene tu crush", que son ganas de hacer el ridículo, pero en fin :D
Muchas gracias por tu comentario, y ya ves que lo de "tontinglish" era inevitable; no podía llamarlo de otra manera :D
Me gustan sobre todo los nombres de las categorías, y el ''no sé lo que me digo'' me hace mucha gracia, porque es muy apropiado. Me alegro de que ese ''perpetuado el robo'' haya ganado un premio Gamba, porque lo he escuchado más de una vez; casi merecería un Gamba de honor.
Y los ''tontinglish'' me temo que nos darán la brasa durante mucho tiempo, si es que no terminan de cambiar la lengua de un modo acelerado. No tengo problema en aceptar ciertos neologismos, pero muchas veces me domina la vergüenza ajena. Son las redes sociales e internet, que van en la dirección de la comunicación global, haciendo que un chaval de Cuenca utilice expresiones del contexto de, qué sé yo, Colombia, Puerto Rico o Miami. No podemos olvidar tampoco la influencia de la música que triunfa en la juventud, aunque no quiero caer en el típico desprecio generacional del ''la música de antes sí que era buena...'' porque sería un error: que se la guisen ellos, eso sí.
Tema aparte tu penúltimo premio ''tontinglish'', el que más gracia me ha hecho. Ahí la culpa la tiene el marketing de cosméticos, como si por contener términos extranjeros fuesen a ser más efectivos. Como sabemos, tiene que ver con el inveterado complejo español. Mucho antes de los ejemplos que traes, ya estaba muy extendido el uso de ''Lifting'' facial.
Y tema aparte son los anuncios de colonia... ¿Hay algo más vacío en contenido que un anuncio de perfume? Siempre han usado palabras de fachada sofisticada, en este caso con preferencia por el francés, o a veces el italiano.
Rodión, celebro que te hayan gustado los Premios Gamba y te hayan hecho gracia los nombres de las categorías :D
Es cierto, los neologismos no son nada malo, al contrario, como los préstamos lingüísticos. Son formas naturales de enriquecer y ampliar los idiomas, y por lo tanto el pensamiento de sus hablantes.
Pero cuando son innecesarios, cuando se meten con calzador en la conversación para impresionar al oyente, para "dárselas de pan y manteca", como dicen mis mayores, o cuando directamente lo que hacen es empobrecer la expresión, cargándola de palabras y frases erróneas, entonces es un desbarajuste que enfada bastante.
Pero sí, es algo inevitable, entre otras razones porque, en efecto, hoy todo se propaga y se contagia como eso que ya sabemos.
Gracias por tus observaciones, como siempre.
Recuerdo que antes escuchaba un programa de radio de los gazapos que se colaban. Creo que lo pasaron a televisión, que desde luego es un lugar abonado para este caso.
¡Y no me acuerdo del nombre!
Hola, Bubo.
Tampoco sé yo a qué programa te refieres. Pero la cosa daría para más de uno, desde luego.
¡Cómo engancha tu blog! Debería estar trabajando y por aquí me tienes paseando.
:)
Besos
Pues me alegro mucho, Eme, de que te guste pasear por aquí. Solo espero que tu jefe no se enfade :)
Gracias!
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