domingo, 19 de marzo de 2017

Ha vuelto a ocurrir. La solución.


En la entrada anterior les propuse a ustedes que jugaran a adivinar qué argumento literario, de los tres que les presentaba, era un argumento real, es decir, que correspondía a una obra existente, ya que los otros dos eran inventados para el juego.

Antes de revelar la solución quisiera dar las gracias a los lectores que han participado, por jugar y por los comentarios –enjundiosos y divertidos- que han hecho sobre los títulos y los argumentos propuestos, y sobre los motivos por los que han elegido un argumento y no otro.

Y es que verdaderamente resulta interesante ver cómo en algunos casos un determinado argumento novelero ha sido elegido por unos lectores y rechazado por otros por motivos similares. O cómo dos argumentos diferentes han sido elegidos por una misma razón.

Por ejemplo, *entangled* rechazó “Un susurro en la tormenta” porque le parecía “una mezcla de Oliver Twist y Little Boy Lost”. Sí, tal vez demasiado literario para ser real. 
Y también JuanRa y Anónimo descartaron este argumento,  justo por el hecho de que pareciera tan probable como argumento real. 

En cambio, por esa misma razón, porque resultaba muy literario,  la mayoría de los lectores consideró precisamente “Un susurro en la tormenta” como el más probable, y  por lo tanto ha sido el más votado como verdadero.

Es decir, un mismo razonamiento ha llevado a conclusiones diferentes. Y esos razonamientos y esas conclusiones resultan tan coherentes en un caso como en otro. 
Quizá esto signifique que ciertos aspectos la literatura tienen sus propias razones, que escapan a los rigores de la pura razón. 
Y conste que esto no es una crítica de la razón pura, si me permiten el tonto juego de palabras.
En resumen, el argumento más votado como verdadero ha sido el que calificamos como “dickensiano”, es decir “Un susurro en la tormenta”, que ha sido elegido por seis lectores: Chaly Vera, Sara, Soros, Rick, Juan Carlos, Holden y Metalsaurio.
El segundo más votado ha sido el que calificamos como gótico, esto es,  “En lo profundo de mi habitación”, elegido por Conxita, *entangled*, Guille y MJ.
Y el argumento que consideramos como de ciencia ficción, “La biblia del corazón”, sólo ha sido elegido por JuanRa y por Anónimo.

Dicen que la mayoría siempre tiene razón, y aunque habrá casos en que no sea así, en esta ocasión sí se cumple tal afirmación, porque el argumento real es, en efecto, “Un susurro en la tormenta”, que corresponde en realidad a una breve novela titulada Maurice o La cabaña del pescador, escrita por Mary Shelley en 1820.


Así pues, enhorabuena a Chaly VeraSara, SorosRick, Juan Carlos, Holden y Metalsaurio, aunque a mí también me gusta que los demás jugadores no hayan acertado, porque eso significa que han preferido los argumentos inventados. 

Por cierto, estarán pensando ustedes, acertadamente, que tratándose de una obra de Mary Shelley, no podemos en rigor calificarla de “dickensiana”, por obvias razones cronológicas, aunque sí que podría considerarse “pre-dickensiana”. He aquí un interesante tema de estudio.

En fin, muchas gracias de nuevo a todos por la amabilidad con que han respondido a mi propuesta, como es habitual en ustedes, y espero que lo hayan pasado tan bien como yo con este nuevo juego.




Mary Shelley. Maurice o La cabaña del pescador. (Ediciones B, 2001)
Traducción de Rita da Costa.

17 comentarios:

Soros dijo...

Imagina que, ahora, escribes la trama de una novela de modo resumido y pides a cada uno de tus lectores que escriba el desenlace también de forma concisa (con cien palabras, por ejemplo).
Si la novela es imaginaria, cada cual podría votar luego el desenlace que más le ha gustado.
Si la novela es real, tú podría luego desvelar el desenlace que más se acerca al verdadero.
Perdona, ya sé que no necesitas ideas, pero puestos a jugar...
Gracias por tus juegos.

Marisa C dijo...

Siento muchísimo haberme perdido este resto. En serio. Parece que mi falta de tiempo está afectando a lo verdaderamente importante; tendré que replantearme mis prioridades. Enhorabuena a los que sí han participado, hayan acertado o no, porque el premio era jugar. Abrazos.

Macondo dijo...

Otra vez estaré menos soso y trataré de participar en vez de decir que todos los argumentos me parecen factibles.

Sara dijo...

¡¡¡Aturdida!!! ¡¡¡Aturdida me he quedado!!! Porque, aunque veo que la idea de Soros es apasionante, miedo me da...

¿Conque "Un susurro en la tormenta?" Me congratulo por la parte que me toca, pero no puedo dejar de felicitar -yo también- a todos los participantes por lo bien razonadas y expuestas que han estado sus opciones.

¡Muchos besos, Ángeles, feliz día del padre!

Rick dijo...

Bueno, estas cosas siempre dependen más de la casualidad que de cualquier otro factor, pero en fin: ese punto dickensiano era efectivamente el decisivo, el que podía resultar al mismo tiempo tan lógico como demasiado trillado, demasiado evidente para que fuese la solución al enigma.

Que por cierto, no conozco esa novelilla de la señora Shelley. Un día de estos tengo que ponerme a solucionar unas cuantas carencias litararias. No todo a va a ser mi amado don Vladimiro...

Conxita C. dijo...

Enhorabuena a la mayoría ganadora y a ti Ángeles por el juego y por esos argumentos tan interesantes que nos hicieron a algunas inclinarnos por el inventado, sugería tanto ¿para cuándo lo escribes?

Y desde luego lo de las ideas para jugar es un no parar, ya ves que tienes lectores muy juguetones y nos apuntamos a todo aunque estoy con Sara, miedo me da la idea de Soros.

Un beso

Juan Carlos dijo...

Hola Ángeles. Sólo decirte que yo escogí el Dickensiano porque me parecía el más previsible, lo que también quiere decir el más aburrido. Es decir, los otros argumentos me parecían más apetecibles, más interesantes, especialmente el del hombre cartel de neón. Resumiendo: enhorabuena por tu imaginación.
Saludos.

Ángeles dijo...


Soros, la idea que propones es muy interesante, aunque ya ves que algunas personas se están asustando :D
Queda anotada tu sugerencia en la agenda de juegos.
Gracias!


Pues sí, Marisa, te eché de menos en el juego, pero ya comprendo que las cosas “verdaderamente importantes” han de quedar relegadas a veces ;)

Me ha gustado eso de que el premio era jugar. Gracias!


Gracias,Macondo. Me encantará que juegues en la próxima ocasión, si te apetece.


Sí, Sara, la idea de Soros es muy interesante, y espero que se te pase el miedo por si la ponemos en marcha.
Lo del día del padre no lo entiendo bien, pero gracias :D


Así es, Rick, la casualidad tiene mucho peso en este juego, y algo también la intuición, supongo. O quizá la manera de presentar los argumentos. Quizá el “dickensiano” tenía tanto peso literario que inclinaba la balanza tanto a favor como en contra. Cuestión que me sigue pareciendo interesante.

La “novelilla de la señora Shelley”, que es en realidad un cuento infantil, es poco conocida. De hecho, se desconocía su existencia hasta hace relativamente poco, cuando se encontró el manuscrito casualmente, en Italia.

Gracias, y saludos a don Vladimiro ;)


Muchas gracias, Conxita.
Lo de desarrollar los argumentos es broma, ¿no? Ya me parecía :D

Sí, me encanta que los lectores de este blog tenga ese espíritu juguetón que siempre demuestran; tanto que algunos, como Soros en este caso, no sólo juegan sino que además proponen nuevos juegos. Es algo genial.
Un abrazo.


Muchas gracias, Juan Carlos. Me encanta que mis argumentos inventados te parezcan más interesantes que el real, con permiso de Mary Shelley, claro, jeje. Y mira que ella sí que tenía imaginación, eh?
Saludos!

guille dijo...

jo, es que no gano nunca.

No es que sea lo importante ganar, lo es el jugar divirtiéndose. Pero es que -supongo- que ganar debe ser la ostia (si, sin h).

jijijijiji

Pero dada mi legendaria estructura genética en cuanto haya otro juego de estos lo volveré a intentar.

JuanRa Diablo dijo...

Y yo que pretendía ganar... Porque qué quieres que te diga, donde esté una historia donde la sangre de un joven se convierte en un fluido fluorescente... ¡Que se quiten niños maltratados, ricos arquitectos y ancianas misteriosas!

¡Esa era la historia chula que debería existir!

Pero bueno, la diversión con este juego no me la quita nadie. Ahora solo espero que sigas retándonos con muchos más piensamuchos de este estilo, porque el próximo lo gano, ¡vaya que si lo gano! ;p

Ángeles dijo...

Qué va, Guille, en estos juegos no se gana ni se pierde. Unas veces aciertan unos y otras veces otros, sólo eso.

Aunque hay alguien que, de una manera u otra, siempre sale ganando: yo.

De todas formas, me alegra mucho que tengas esa estructura genética, así que te apunto para el próximo.
Gracias!


JuanRa, me alegro mucho de que te hayas divertido con el juego, y me alegra casi igual que una de las historias inventadas te parezca la más chula. Gracias!

La verdad es que a mí me encanta que no acerteis :D pero a ver si con el próximo te lo pasas igual de bien y encima ganas. Sería una jugada diabólica :p

MJ dijo...

Yo también prefería la historia inventada. La que yo elegí me parecía de lo más novedosa. ¡Así que a por ella! :-D
¡Qué casualidad que hace unas semanas estuve leyendo sobre la vida y obra de Mary Shelley! Efectivamente nombraban esa novelita, pero no hablaban del argumento por lo que no la he reconocido. Nunca habría imaginado que ese argumento era de ella.
¡Oye, me parece muy buena la idea de Soros! Es cierto que da un poquito de miedo, pero yo creo que todos los escogidos e inteligentes comentaristas que tienes serían capaces de escribir grandes desenlaces para ese argumento que inventes :-D

*entangled* dijo...

No es que Un susurro en la tormenta me pareciera demasiado literario, es que me parecía improbable que tánta gente haya escrito sobre el tema del niño abandonado que se busca (esto es un homenaje al Dómine Cabra) la vida a ver si encuentra un padre, real o no que le solucione el porvenir. Aparte de los que menciono, sugiere otros temas de la literatura picaresca española, Rinconetes, Cortadillos, Lazarilos et al.

Y definitivamente, La biblia del corazón era altamente improbable.

Felicitaciones a los acertantes. Y al igual que otros lectores, sugiero que nos pongas en otra ocasión más deberes. Creo que es una magnífica forma de interacción muy poco usual en los blogs.

Saludos.

Ángeles dijo...


Gracias, MJ, me alegra que prefieras los argumentos inventados, je-je.
Vaya, pues la idea de Soros habrá que llevarla a cabo, no vaya a ser que os enfadeis conmigo ;)
Así que ve afilando el lápiz!


Sí, *entangled*, al decir "demasiado literario" me refería justamente a lo que dices tú, pero no lo expresé bien.

Me encanta que queráis más deberes. A mí también me parece una forma de interacción muy interesante, sobre todo porque los participantes sois los que sois. Así que sí, ya irán llegando nuevas propuestas.

Saludos y muchas gracias.

Holden dijo...

Estaba claro: Dickens nunca falla. Al menos a los zorros nunca nos falla, ojo, quizá con los humanos la norma no os funcione tan bien ;)

Metalsaurio dijo...

Acabo de ver que he acertado, jeje! Que conste que aunque estaba la solución publicada, he respetado las normas y no la había leído previamente la respueta.

Un saludo.

Ángeles dijo...

ES verdad, Holden, Dickens nunca falla, pero también es verdad que a los zorros os tiene una consideración especial :D


Ya suponía, Metalsaurio, que si jugabas, jugabas del todo, como tiene que ser.
Y por ello te has ganado tu sitio en la lista de jugadores y la de ganadores ;)