martes, 13 de octubre de 2009

Traducciones automáticas. La gramática descoyuntada.



La traducción es una disciplina apasionante. Requiere conocimiento de las lenguas, obviamente, pero también creatividad y talento artístico. Hombre, no es lo mismo traducir un texto técnico que uno literario, pero hasta para traducir las instrucciones de uso de un embudo hace falta un mínimo de coherencia en la redacción.
Bueno, pues siendo como es tan difícil hacer una traducción en condiciones, o sea, trasladar de un idioma a otro significados, sentidos, intenciones y estilo, todavía hay quien cree que eso lo puede hacer una máquina.
El deseo de inventar una máquina de traducir es algo casi tan antiguo como el deseo de volar. Y se ha conseguido casi lo mismo: un remedo, una imitación pasable, pero que de ningún modo iguala a la capacidad imitada.
En los años 50 los expertos creyeron estar cerca de la solución, pero de ahí no pasaron, de creerlo. Después, en los 80, con la campanada informática, pareció que la cosa estaba ya solucionada y que en poco tiempo la máquina traductora sería un sueño cumplido. Pero otra vez su gozo en un pozo.
Por mucho que se intente, yo estoy convencida de que jamás un ordenador, por avanzado que sea, podrá realizar una tarea tan delicada, tan exquisita y tan sumamente compleja como es la traducción.

Dicen los expertos que en los últimos años se han logrado grandes avances, sobre todo en la traducción de textos no literarios y entre idiomas de tipología afín. Por ejemplo, el español y el portugués. O el inglés y el alemán. Pero entre idiomas tipológicamente muy distintos, como el español y el inglés, la cosa deja mucho que desear.
Y dicen también que entre los mejores programas de traducción automática está el de Google.

El caso es que, algunas veces, cuando busco en Google información sobre algún tema, me entretengo en clicar la opción “traducir esta página” que aparece al lado de cada enlace. Y digo “me entretengo” con todo su sentido, porque es realmente un magnífico entretenimiento leer las traducciones automáticas de los textos, porque a veces ofrecen resultados verdaderamente cómicos.
Menos mal que las máquinas no se ofenden (de momento).


Por hacer una prueba, elijo una canción que me gusta, Down on the Corner, de Credence Clearwater Revival, para comparar la traducción automática con una traducción humana. Y compruebo que la mayoría de las frases, al ser traducidas automáticamente, quedan de lo más tonto.


Quiero dejar claro que las traducciones que hago aquí son sólo una posible versión; yo misma haría una traducción diferente en otro momento, y cualquier traductor profesional o aficionado podría hacer traducciones diferentes y sin duda mejores. Pero siempre manteniendo el sentido y la corrección gramatical, por supuesto.
Y tampoco estoy haciendo adaptaciones de la letra; ni me atrevería, porque eso requiere un talento añadido y compositora sí que no soy.


Bueno, veamos algunos fragmentos de la canción. Por ejemplo:

"Four kids on the corner trying to bring you up
Willy picks a tune out and he blows it on the harp".


Una traducción humana, en este caso la mía, podría ser:

"Cuatro chicos en la esquina intentando atraer tu atención,
Willy elige una melodía y la toca en el arpa".


Y un traductor automático, en este caso el de Google, nos da:



"Cuatro chicos en la esquina tratando de traer para arriba,
Willy elige una melodía y sopla sobre el arpa"


Otras frases de la misma canción:

1.Bring a nickel, tap your feet


Traducción humana: “Traiga una moneda, siga el ritmo con los pies”


Traducción automática: "Bring a nickel, toque en sus pies" (se ve que lo que no le gusta no lo traduce).

2. Blinky thumps the gutbass
Traducción humana: "Blinky aporrea el bajo"

Traducción automática: "Blinky golpes bajo la tripa


3. You don’t need a penny just to hang around
but if you’ve got a nickel, won’t you lay your money down?


Traducción humana: "No hay que pagar por acercarse a mirar,
pero si tiene una moneda, ¿nos la da?"

Traducción automática: "Usted no necesita un centavo sólo por estar en todo
pero si youve consiguió un centavo, no usted poner su dinero abajo?"

Lo dicho, la gramática descoyuntada: la sintaxis por los suelos, la semántica hecha polvo...

Pero en realidad, me alegro de que esto sea así, porque es una satisfacción ver que sigue habiendo cosas que los humanos hacemos mejor que los ordenadores.


18 comentarios:

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo contigo en que, a día de hoy, es una empresa pretenciosa ambicionar que una máquina pueda sustituir la capacidad humana para captar ciertos matices. La canción que mencionas es un espeluznante ejemplo de ello.
Sara.

Ángeles dijo...

Gracias, Sara.
Te aseguro que hay ejemplos de traducciones automáticas aun más 'espeluznantes' -o divertidos, según se mire- que el que he utilizado.
Un saludo.

Anónimo dijo...

Siempre que busco una información lo hago en castellano, porque sé que no voy a entender otra. He visto eso de "traducir esta página", pero ni siquiera me he molestado en pulsar, sabía que la traducción seria literal y sin significado "real", sin el talento de una persona.
Ellos siguen intentándolo, pero nunca conseguirán que una máquina tenga ese maravillosa "lógica sensible" que tienen las personas.
MJ

Ángeles dijo...

Me gusta eso de la 'lógica sensible'.
Gracias, MJ.

Soros dijo...

Tal vez hay, en estos intentos como en tantos otros, un deseo de automatizarlo todo olvidando que lo que más caracteriza al ser humano es el arte o la artesanía. Una traducción es un trabajo artesano y, aun así, a veces, el autor no estará de acuerdo con lo que tradujo el traductor. Y ya, si hablamos de poetas, por ejemplo, a veces es casi imposible interpretar lo que dicen incluso en su propio idioma. Ponte a traducirles y verás. No están aún las traducciones para las uñas de la técnica informática.
Saludos.

Ángeles dijo...

Pues sí, Soros, yo creo que poco más se puede añadir.
Gracias.

Anónimo dijo...

Me ha encantado este artículo. Coincido plenamente contigo, y además, me encanta la Credence.

F.

Anónimo dijo...

Me he reído mucho y me siento muy comprendida. Alguien como yo que suele bucear por esas páginas sin tener mucha idea de inglés, a veces me he visto tentada de usar las traducciones automáticas de Google con resultados bastantes estrafalarios y divertidos.

O.

loquemeahorro dijo...

Pero ¿y lo divertido que es?

Porque en serio no se hace ¿verdad?

Ángeles dijo...

Pues sí, loque, se supone que es en serio. Lo divertido es que hay gente que cree que 'eso' es traducir y lo dan por bueno, y lo usan...

Anónimo dijo...

Ah qué buenos los Credence! A mí también me gustan mucho.
Bueno a los que vamos. Que Dio te oiga y las puñeteras máquinas no superen nunca a nuestra inteligencia (sí ya sé lo del ajedrez y tal, pero espero que sigan así, que los ingenieros nunca sean capaces de dotarlas de intuición y de talento creador, porque es que si no, de momento, nuestra dignidad de humanos quedará por los suelos ante esos engendros que sabrán pensar más y mejor que nosotros y acabarán dominándonos. ¡YA verás, ya!
Bueno, y estos traductores, ¿realmente ayudan a la gente?

carlos

Ángeles dijo...

Carlos, me alegro de que coincidamos en el gusto por este grupo, o banda, como hay que decir desde hace un tiempo.

Yo estoy segura de que un traductor automático no puede llegar a ser más que lo que es ahora: un diccionario muy gordo mecanizado. En vez de buscar las palabras tú, pasando páginas o tecleándolas en un casillero (en el caso de los diccionarios online), el traductor busca las palabras el solito. Si son palabras sueltas y no tienen más que una o dos acepciones, o son frases breves o frases hechas comunes, pues sí, te sirve, pero como si lo buscaras tú mismo en un diccionario cualquiera.
En cuanto la cosa se complica con frases más complejas o palabras con muchas acepciones, pues ya ves la que se lía. El traductor busca las palabras pero no sabe ordenarlas ni decidir cuál es la acepción que corresponde según el contexto.
Así que no tengas miedo, je,je.


JuanRa Diablo dijo...

De ahi la frase:

"Eres más falso que el traductor de Google" :D

Y es que es lo que yo digo, ya que meten a un chinito dentro de los ordenadores para hacer estos trabajos, que al menos los elijan profesionales, ¡que sepan idiomas de verdad!

Ángeles dijo...


Ah, pero, ¿así es como funciona? :D

JuanRa Diablo dijo...

Sí, ¿no?

¿Cómo va a funcional si no?

Ángeles dijo...

XD

guille dijo...

Yo también juego a veces a torturar al traductor.
Es una venganza por todo lo que me equivoca.

Es mejor con palabras sueltas.

En cuanto le colocas una frase de cinco palabras patina.

Por cierto, fantástica canción de uno de los grupos mas originales sin tener que cambiar el molde.
Lastima esas diferencias que suelen aparecer entre Caín y Abel.

Si Willy es capaz de soplar un arpa ni te digo si sopla en algún lugar adecuado. ¿No será al final que el google traductor es un chistoso?

Ángeles dijo...

I agree con todo, sobre todo con que el traductor sea un chistoso :D